viernes, 19 de abril de 2019

Fin del Erasmus, que no de las ganas de repetir

Bueno, pues se acabó. Parece que no, pero conforme vuelves a la rutina te entra nostalgia. Después de un mes en Malta, ha tocado volver, aunque con descanso de por medio, lo cuál se agradece bastante.

En los próximos párrafos y líneas os resumo a título personal lo que he vivido estando de Erasmus por esas tierras.


He estado muy cómoda en la residencia de NSTS ya que había facilidades de todo tipo (desayuno gratis,lavandería,recepción 24h) y la atención siempre ha sido buena. Además esta cerca de dos zonas con varias paradas de autobuses, así que no está mal comunicado en absoluto. Lo recomiendo encarecidamente para quedarse un tiempo.

En la empresa, aunque me haya tocado hacer tareas monótonas, no se me ha hecho apenas pesado y aprendes a valorar la importancia del trabajo. Además, los trabajadores eran muy majos y amables, siempre agradeciendo que realizarás la tarea.

Y en cuanto a la convivencia, era algo nuevo, así que te das cuenta de las cosas que puedes mejorar y ayuda a conocerse más. En mi caso ha sido agradable, así que me llevo una buena primera experiencia.

El país me ha gustado; los paisajes que tiene al ser una isla son absolutamente preciosos, siempre me ha gustado observar el mar, y al vivir en una ciudad sin costa aún lo valoras más cuando vas a verlo.

De diferencias de comportamientos/culturales sin duda la que más choca, aunque no me ha costado apenas acostumbrarme es la casi ausencia de pasos de peatones y semáforos en el país.

He de decir que ha sido mi primera vez fuera de España, y ya estoy deseando viajar más y conocer otros lugares y culturas. Para mí ha sido una experiencia muy enriquecedora y agradable y considero que he aprendido bastantes cosas.

Me llevo buenos recuerdos del país y sus vistas, y muchas ganas de viajar. ¡Os recomiendo aprovechar oportunidades así sin ninguna duda!

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