En esta cuarta semana de estar en Vilna, decidimos ir a los campos de baloncesto que se encuentran debajo del puente de la ciudad de los que nos hablaron unos chicos del hotel que conocimos. Fue una experiencia más personal por así decirlo, ya que nos adaptamos un poco con la cultura deportiva lituana pero era como estar en casa jugando al baloncesto con cualquier persona y tuvimos la oportunidad de hacer nuevos amigos. Conocimos a dos lituanos muy buenos en baloncesto, Aiseig y Nautilus, al menos eso es lo que creemos que era su nombre porque no les entendimos muy bien.A pesar de la falta de comunicación nos reímos con ellos, eran muy majos y aparte hubo un pique sano para darle más entretenimiento a los partidos. En cuanto a la comida, siempre nos gusta probar platos típicos del lugar en el que estamos.
Estos chicos nos habían recomendado probar las captaduanas, una plato local de Lituania que según ellos estaba muy muy bueno. Sin embargo, decidimos dejarlo para otro día y optamos por una cena más familiar en Domino's Pizza. Aunque no tenían buffet libre,que era lo que queríamos,nos conformamos con solo las pizzas, que estaban muy buenas.Estuvo bien disfrutar de un sabor conocido en medio de un lugar en el que constantemente probamos cosas nuevas,de todas formas Vilna es un lugar en el que hay comidas que todavía no hemos probado y seguro que están muy buenas.
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